Coco, era un cocodrilo que vivía en París, desde muy pequeña contemplaba los castillos desde su pantano, pensaba a diario lo fantástico que sería ser un dragón.
Los cocodrilos que la escuchaban rompían en risas —jajaja "¿Coco un Dragón?", jajaja.— Ni las risas, ni las críticas le impedían querer ser un dragón.
Hasta que un día, mientras dormía, una majestuosa y flamante luz se coló por un resquicio entrando a su corazón; al día siguiente su corazón latía incesante como el de un dragón.
En su interior ya hacia un dragón. Coco había sido elegida por el universo ya que contaba con: nobleza, inteligencia, fortaleza, lealtad y coraje para defender su presente... ¡LA VIDA!