Pobladores de la Sierra de este municipio, volvieron a denunciar ataques de grupos de la delincuencia con drones artillados, ahora en poblaciones como El Parotal.
Contaron que desde el día 5 de mayo del presente año, varios han sido los ataques con drones artillados en la ruta serrana Santa Rosa-Ell Durazno en la Sierra petatleca, específicamente en las poblaciones de El parotal, La Mona, El Camarón y Las Mesas.
Dijeron que han sido blanco de los ataques, que ha dejado como saldo varias personas muertas y heridas así como viviendas y vehículos que han sido impactados.
Ante estos ataques calificados como terrorismo, los habitantes de esta ruta varias veces han protestado y han cerrado la carretera para exigir al gobierno federal y estatal que intervengan en esta grave problemática, y que logren pacificar esta zona del municipio de Petatlán.
Los afectados exigieron la construcción de bases militares y de la Guardia Nacional en puntos estratégicos, para que los grupos delincuenciales que quieren incursionar en esta zona sean combatidos.
Tras recorrer esta zona, se logró ver la angustia y la zozobra entre los habitantes, el camino de Santa Rosa al Parotal, en algunos tramos se encuentra en pésimas condiciones, y se logró ver alguna cuatrimoto donde transportan víveres, el ganado anda suelto en la carretera, algunos sembradíos de maíz están abandonados, ya que mucha gente ha optado por abandonar estas tierras donde tienen su patrimonio, sus negocios, principalmente la ganadería está afectada.
Los drones son utilizados para aterrorizar y matar a los pobladores, ya que han sido adaptados para lanzar proyectiles de fabricación casera, pero que han impactado en viviendas y en vehículos, son drones equipados con una especie de petardo o misiles con alerones adaptados y los cilindros están llenos de clavos, fierros, esquirlas y vidrios, entre otros proyectiles, que son llenados con combustible, para que al impactar incendien su objetivo, algunos proyectiles no lograron detonar, por lo que también fueron recuperados por los habitantes.
En uno de los ataques, un dron se incendió en el aire y cayó cerca de un arroyo, ahí los pobladores extrajeron una memoria USB donde lograron ver grabaciones de los diferentes ataques que han perpetrado, así mismo lograron pegar algunas partes del artefacto.
Uno de los testigos que logró ver las diferentes explosiones, narró el momento en que los proyectiles impactaron en tierra, asimismo exigió a las autoridades que intervengan para que esta ruta vuelva a estar en paz.
Después de los últimos ataques, el pasado primero de diciembre, efectivos del ejército mexicano patrullan esta zona, pero los pobladores exigen al gobierno que instalen una base permanente para que los ataques no se vuelvan a repetir, ya que esta zona es próspera y los habitantes no quieren perder sus patrimonios de toda la vida.
