Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
Candil de la calle… | Maral
Como nunca antes, México vive no sólo una fuerte irritación y rechazo social hacia los políticos, sino una grave crisis de partidos.
Todo a las puertas de la elección más importante y masiva que se haya enfrentado en el país:
1 Presidente de la República, 500 diputados federales, 128 senadores; jefe de Gobierno de la Ciudad de México, 16 alcaldes capitalinos, 64 diputados locales; 8 gubernaturas y cientos de presidencias municipales y diputaciones estatales.
En este contexto, al menos 3 de los 4 partidos mayores (de un total de 8 partidos reconocidos por el INE), enfrentan hoy mismo fuertes tensiones internas no exentas de confrontaciones y rupturas, a causa de la falta de reglas claras para la postulación de sus candidatos presidenciales.
En el PAN, la segunda fuerza política nacional, la crisis amenaza con ser el principio de una gran fractura.
Todo porque su dirigente nacional, el queretano Ricardo Anaya, acapara recursos y espacios de promoción destinados a su partido, en su obvia intención de imponerse como candidato a la Presidencia de la República.
Antes de fine de esta semana, se realizará el primer encuentro de la cúpula panista con la asistencia de prácticamente todos los personajes que forman el poder real dentro de este partido, para definir reglas y tiempos de la postulación del candidato presidencial.
Todo advierte que la reunión no será ni fácil ni tersa.
En el PRD las corrientes y tribus se jalonean, unas a favor de irse tras la tercera postulación de Andrés Manuel López Obrador, y otras en contra. Sus aspirantes internos no han crecido, y se ve difícil que lo logren.
Encima tienen la renovación de la dirigencia nacional que encabeza Alejandra Barrales, cargo que es peleado por todas las fuerzas internas, lo que agudiza la crisis perredista.
Dentro de este contexto, todo indicaba que el PRI, la principal fuerza nacional, llegaría a su Asamblea Nacional de agosto próximo sin grandes problemas. No fue así.
Todo cambió el fin de semana luego de un encuentro de 89 connotados priístas que pusieron contra la pared a la dirigencia tricolor integrada por Enrique Peña Nieto, Enrique Ochoa Reza y Claudia Ruiz Massieu.
El grupo tricolor rebelde exige, nada más y nada menos:
-Que en la mencionada Asamblea Nacional de agosto no se abran los candados que establecen que quien sea el candidato presidencial del PRI deberá tener al menos 10 años de militancia, y;
-Que su postulación la haga la militancia en un proceso de elección abierta… y no Peña Nieto.
El choque quedó planteado cuando el senador con licencia Arturo Zamora, en su calidad de dirigente de la CNOP y representante de la cúpula partidaria, indicó que el grupo rebelde de los 89 pretendía ’destruir’ al PRI.
’Están buscando destruir y criticar un proyecto político ganador. Ahí están los resultados electorales que nos fueron favorables. No caben esas expresiones que surgen a partir de ambiciones personales. Son descalificaciones sin sustento’, abundó.
En el Partido del Trabajo no hay conflicto. Ya se sabe que van junto con Morena, único partido que tiene candidato desde antes de nacer y este es Andrés Manuel López Obrador, quien va por su tercera postulación y casi 20 años de una campaña interminable.
Ahí el único problema irresoluble es el de superar las necedades del tabasqueño que son las que lo han llevado al fracaso en 2006 y en 2012.
El Partido Verde Ecologista, junto con el Partido Nueva Alianza y el Partido Encuentro Social, esperan que el PRI lance a su candidato para unirse a ese proyecto.
El Movimiento Ciudadano, propiedad del veracruzano Dante Delgado, fue dejado fuera por AMLO de su proyecto, y buscará quizá ir sólo.
Todos ellos, conocidos como ’La morralla electoral’, porque no cuentan con fuerza suficiente como para representar un riesgo para los 4 mayoritarios, simplemente no tienen mayor conflicto que el del repudio social que viven todos los partidos.
Sin candidatos independientes con posibilidades de crecimiento, el sistema de partidos continúa como el eje del ascenso y renovación de poderes en México.
IVONNE ORTEGA
Integrante del grupo rebelde de los 89, la ex gobernadora de Yucatán y ex secretaria general del CEN del PRI, la diputada federal Ivonne Ortega Pacheco dio la cara ayer a los medios ante quienes hizo una fuerte crítica y advertencia a sus dirigentes partidarios.
Habló de que inicia apenas su segundo recorrido por la República en la búsqueda de construir una base suficiente para pelear la candidatura priísta a la Presidencia de México.
De su primer recorrido, dijo, trae el reclamo persistente de los militantes quienes exigen ser escuchados y tomados en cuenta por la dirigencia del PRI.
Quieren los militantes, dijo, que las candidaturas del PRI (especialmente para la Presidencia de la República) salgan de consultas a la base militante.
Ortega denunció que, desde el encuentro de fin de semana, ha sido blanco de ataques en redes que buscan denigrarla.
Adelantó que durante la Asamblea Nacional y a petición de otros, llevará varias propuestas, y que en lo personal propondrá legislar para acortar de 6 a 4 años la Presidencia de la República con opción a ser reelegido por otros 4 años. Un sistema similar al de Estados Unidos.
Considera que este sistema disminuiría las tensiones existentes ahora en México y permitiría que los ciudadanos no votaran por aquel presidente que hubiera hecho un mal papel en el cargo.
Interrogada sobre las reacciones que pudiera generar su participación en el grupo de los 89, la ex gobernadora indicó que no se ve fuera del PRI.
Confió en que Enrique Ochoa Reza los escuche y abra los cauces para un diálogo fructífero con quienes disienten o de plano se oponen a la actual dirigencia nacional.
De otra forma, afirmó, habrá ruptura que perfilaría una derrota anticipada del PRI en las elecciones de 2018.
TODO SE ALINEA
En otro orden, senadores y diputados trabajan a marchas forzadas en el dictamen de las diferentes propuestas de Ley Interior y de Mando Mixto Policiaco, para que se pueda realizar en las siguientes semanas el extraordinario demandado insistentemente por el verde Pablo Escudero, presidente del Senado y de la Comisión Permanente, y por el coordinador de la bancada del PRI en la cámara alta, Emilio Gamboa.
Ha trascendido que, en las comisiones respectivas, se trabaja en resúmenes de las iniciativas presentadas por las diversas fracciones a fin de elaborar un dictamen que reúna lo más importante de cada una.
Los trabajos se realizan aun cuando existe todavía la oposición del PAN y del PRD.
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