Repercusiones de la marcha

Aunque intente negarlo, al presidente Andrés Manuel López Obrador no solo le molestó, sino que le enfado la marcha en varias partes del país la marcha en defensa del Instituto Nacional Electoral y de la democracia, para expresar su inconformidad y rechazó a su reforma electoral.
Durante la conferencia mañanera del lunes dio su versión de cómo tanto él como varios morenistas intentaron minimizar los hechos, con lo cual faltaron flagrantemente a dos de sus principios básicos: el de no mentir y no engañar.
Fue algo simultáneo: mintieron y engañaron al afirmar y difundir en redes sociales que a la marcha en la Ciudad de México acudieron apenas entre diez y doce mil personas, cuando la realidad fueron, de acuerdo a los organizadores, entre doscientos mil quinientos mil asistentes. Para los impulsores esa cifra no fue lo más importante, ya que también deberían incluirse a quienes asistieron a las manifestaciones en aproximadamente cuarenta ciudades del interior.
Incluso López Obrador utilizó en su favor el que ’haya permitido’ que la marcha pudiera concluir en el Zócalo capitalino ya que, según su opinión no participó mucha gente y calculó que fueron entre 50 y 60 mil personas, pues ’con esa cantidad de gente no lo iban a poder llenar’ y retó a sus opositores a realizar una nueva marcha con más gente.
La mentira y el engaño otra vez. Basta con ver los videos y fotos tanto en medios de comunicación tradicionales como en los electrónicos y en redes sociales para ver que el número de participantes fue muchísimo mayor que la citada por el político tabasqueño y, por lo tanto, no se tiene que organizar otra marcha nada más para complacerlo.
Otro punto debe preocupar a López Obrador y a los morenistas: en el interior del país hubo marchas, desde Monterrey, Cuernavaca, Veracruz, Xalapa, Acapulco, Durango, Pachuca, Mérida, Tepic, Ciudad Victoria, Aguascalientes, La Paz, Campeche, Hermosillo, Morelia, Campeche, Zacatecas, León, Irapuato, Guanajuato, Tabasco, Villahermosa, Querétaro, Tijuana, Chihuahua, San Luis Potosí, Puebla, Cancún hasta Guadalajara, entre otras.
Sucede que varias son capitales de estados gobernados por morenistas o partidos afines, como son Morelos, Veracruz, Hidalgo, Tamaulipas, Campeche, Sonora, Zacatecas, Michoacán, Baja California, Baja California Sur, San Luis Potosí, Quintana Roo y Puebla.
El tema de la marcha ciudadana no ha terminado, Habrá nuevas y mayores repercusiones tanto del lado oficial como del opositor, siendo una de ellas la posible reactivación de la alianza PRI, PAN y PRD, para las futuras elecciones locales y federales.