Lectura política
Noé Mondragón Norato
No es un asunto nuevo. De hecho, los escándalos financieros en la Secretaría de Salud datan desde que por primera vez los ventilara públicamente, el exgobernador neo perredista Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, quien detectó en julio de 2005 -tres meses después de arribar como gobernante de ’la alternancia’-, un faltante por más 40 millones de pesos en esa dependencia. Alborotó el avispero político. Entre las pezuñas de aquellos salvajes caballos, quedaron atrapados el exedil de Iguala, el priísta Herón Delgado Castañeda y la actual presidenta de la Mesa Directiva del Congreso local y eterna trepadora del poder político tricolor, Verónica Muñoz Parra. Intervinieron padrinazgos políticos. Los exgobernadores Rubén Figueroa Alcocer y René Juárez Cisneros se movieron. Cabildearon con Zeferino. Lograron acuerdos inconfesables. Y todo paró ahí. Ni Herón ni Verónica fueron molestados. De ahí se entiende todo lo demás.
FEDERALIZAR EL SECTOR SALUD.- El viernes próximo quedará formalizada la federalización de la Secretaría de Salud durante un evento que se realizará en Mérida, Yucatán. Esa intención confirma que AMLO viene en serio en el combate a la corrupción. Las pistas lo dicen todo: 1.- Después de la Secretaría de Educación, la dependencia estatal que maneja más recursos es la Secretaría de Salud. Por eso, las cloacas se han multiplicado reiteradamente en esta última dependencia. Y permite explicar entre otras cosas, la falta de medicamentos, material de curación, personal calificado y equipo en los hospitales generales y los centros de Salud comunitarios. También, los desvíos inconfesables de millonarias partidas presupuestales. Así como los que reventaron en 2005. En cierto modo, las ministraciones
federales caen en la Secretaria de Finanzas del gobierno del estado. Y éste a su vez, las transfiere a la Secretaría de Salud. En todo ese proceso, manejo y trayecto, hay puntos oscuros que la federación ya detectó a través de la Auditoria Superior de la Federación (ASF). Por eso AMLO quiere asumir el papel del mítico Perseo. Para cortarle esa cabeza monstruosa a la Medusa guerrerense. 2.- Ventilando escándalos y exhibiendo corruptelas tricolores, el propio exgobernador Zeferino Torreblanca, cayó en la tentación de seguir caminando esa peligrosa senda. Generaría por supuesto, su propia polémica y comedia política. En 2008 -a la mitad de su trienio- la ASF detectó un desfalcó por 40 millones de pesos en la Secretaría de Salud. De ese monto, 24 millones 75 mil pesos se destinaron indebidamente para el pago del ’bono del gobernador’, y 2 millones 503 mil 400 pesos al pago de ’apoyo’ a sindicatos. No fue todo. El viernes 28 de marzo de 2014, la Contraloría del estado citó al ya exgobernador perredista a fin de aclarar un faltante de mil 300 millones de pesos en la Secretaría de Salud. Desde luego, Zeferino politizó el asunto. Y nada pasó. Al final recibió castigo en las urnas en las elecciones de 2015 y 2018 cuando intentó retornar como edil de Acapulco. Cerró su ciclo político. 3.- A pesar de que el gobernador Héctor Astudillo, percibe la federalización de la Secretaría de Salud, como benéfica para la entidad porque ’implica una gran carga financiera para el gobierno estatal’, en el fondo, al propio mandatario estatal le restan capacidad de maniobra en lo referente al manejo de las millonarias partidas presupuestales. Y en el rejuego del poder local, el actual titular de esa dependencia, Carlos de la Peña Pintos, es cuadro político del exgobernador René Juárez Cisneros. Es obvio que le restará esa posición a dicho grupo de poder. Quizás por esa razón, al exgobernador y actual diputado federal se le percibió serio y hasta desencajado el rostro, durante la toma de protesta del dirigente estatal del PRI, apenas el sábado pasado. Al federalizar varias
dependencias estatales, es obvio que la presencia de los grupos priístas se minimizará sustancialmente. Y por ese lado, AMLO los estaría desarticulando. Ese es el punto.
HOJEADAS DE PÁGINAS…El gobernador Astudillo no termina de resolver el asunto de los dos grupos criminales que se disputan el territorio de la sierra en la región centro, cuando en la Costa Grande de la entidad, otros grupos delictivos y ’Policías Comunitarias’ se enfrentan a balazos y dejan su cauda siniestra de muertos. El gobierno estatal aparece tangiblemente rebasado por ambas organizaciones armadas. Está acotado por ellas.