Opinión
Leoncio Castrejón Salgado
La pandemia que estamos padeciendo en el planeta nos ha cambiado, a la mayoría, la forma de ver las cosas, independientemente nuestra credo religioso, social y político. Y digo la mayoría porque a pesar de las evidencias catastróficas en varios sentidos y lugares del planeta, hay algunos individuos, principalmente que son autoridad en los diferentes niveles, que se empecinan, por decir lo más suavecito, en intentar hacer creer que lo que está pasando ’no es tan grave como para armar tanto escándalo…’
Y bueno se entiende porque de esa minoría que no es significativa – afortunadamente - pero que tiene bastante poder, pretende ignorar las circunstancias y acontecimientos por la sencilla razón que ha entrado en pánico tan solo de imaginarse que esta pandemia sanitaria le puede arruinar sus soñadas aspiraciones políticas. Así de sencillo y fácil. De ahí que veamos resistencias que no podemos dar crédito al momento de escuchar declaraciones incoherentes de esos políticos encumbrados y que se encuentran aterrorizados a ante su inminente desgracia política.
Sin embargo, afortunadamente en México también hay dirigentes que se han puesto la camiseta de la solidaridad en momentos y circunstancias tan deplorables e inciertas como las que estamos padeciendo.
En Guerrero, llama la atención de la actitud de los universitarios guerrerenses.
Desde el inminente inicio de la contingencia sanitaria referida, tomaron sabia distancia de por medio. Es entendible porque en la máxima casa de estudios abunda el intelecto y razonamiento del conocimiento científico en sus diferentes variantes. Por tanto, era de esperarse que tomaran cartas en el asunto de manera inequívoca y certera de manera inmediata y expedita.
Para ello sin duda, contó con la determinación visionaria de su rector Javier Saldaña Almazán. Académico de virtudes demostradas en el quehacer universitario.
Vamos por partes. La virtud de este personaje universitario empezó a conocerse a profundidad desde cuando fue capaz de unificar a los diferentes equipos académicos que hacen vida política en la UAGro. Salir como propuesta única para encabezar los destinos de una universidad que necesitaba urgentemente nuevos bríos, nuevos liderazgos con proyectos y propuestas acordes a los tiempos por venir.
En su primer periodo como rector (2013-2017), incorporó nuevas y novedosas formas de cómo dirigir aquella universidad en la que cada quién hacía lo que le venía en gana. Y encaminarla a estándares académicos y de investigación nacionales e incipientes eventos internacionales.
Sin duda, el talento y capacidad de liderazgo para conformar equipos plurales de trabajo le rindieron sus mejores frutos.
Tan es así, que tuvo el consenso nuevamente de los grupos universitarios para transitar por un segundo periodo (2017- 2021) al frente de la UAGro. En éste, consolidó las funciones sustantivas y adjetivas de la universidad. Y lo destacado aún más, sigue siendo la capacidad de gestoría ante instancias gubernamentales y grupos sociales para conseguir recursos para la infraestructura y económicos, que le han permitido a la universidad continuar avanzando sin contratiempos en medio de circunstancias inciertas a nivel nacional.
Los resultados lo colocan como un personaje público que ha estado y sigue empujando para que la UAGro se encuentre por arriba de la media nacional entre las mejores del país, y muy pronto, a nivel internacional. El proceso es imparable.
Javier Saldaña Almazán es un personaje que ha sido solidario y consecuente con la política universitaria al servicio de quienes son más vulnerables en diferentes aspectos. Hoy ha dado un salto cuantitativo, encabeza la Comisión de Salud de la UAGro, misma que en días estará aperturando un Laboratorio con tecnología de punta que le permitirá a la universidad, atender a estudiantes y trabajadores, en primera instancia, que circunstancialmente llegasen a ser infectados con el Covid-19.
Esto, aunado en la gestoría y alianza con el gobernador de Guerrero Héctor Astudillo Flores, quién independientemente de su posición política ha sido solidario de manera permanente en varios aspectos con la UAGro, principalmente con cuantiosos apoyos de recursos económicos.
Por esa relación – que a algunos incomoda - del rector con el gobernador, la universidad es la primera institución educativa en dar certeza laboral y salarial al anunciar públicamente el pago salarial puntual a los trabajadores universitarios de la segunda quincena de marzo. Eso, de momento, es invaluable ante las circunstancias de incertidumbre de la clase trabajadora del país y del mundo.
Eso habla bien de quién pudiendo estar en su burbuja de confort y sin riesgo alguno, decide continuar trabajando y preocupándose porque los universitarios en estos momentos de aciago, sientan y tengan en los hechos el apoyo firme y decidido del líder universitario que ha sabido estar a la altura de las circunstancias. Desde luego, a través de las benditas redes sociales, los universitarios le valoran y agradecen la capacidad de gestoría y de hombre público visionario, porque los momentos históricos así lo demandan.
