Perfil de México
Armando Ríos Ruiz
La historia dice que las relaciones entre Irán e Israel no siempre fueron hostiles. Más bien estuvieron bien asentadas, aceitadas y cordiales, hasta que los ayatolas se hicieron con el poder durante la Revolución Islámica de 1979. Irán fue el segundo país en reconocer la creación del estado de Israel en 1948. El primero fue Egipto. En esos tiempos, Irán era uno de los aliados de Estados Unidos.
En 1979, Ruhollah Jomeini derrocó al Sha y creó la república islámica que, de acuerdo con sus apreciaciones, se trataba de la verdadera defensora de las clases depauperadas y al mismo tiempo repudiaba a Estados Unidos y a su aliado Israel, como distintivo propio de su identidad.
Desde entonces creó un estado de tensión con Israel que personalizó en el desconocimiento de los ´pasaporte de sus ciudadanos. También desconoció la embajada israelí en la capital, Teherán y la entregó a la Organización para la Liberación de ¨Palestina (OLP), que entonces libraba una guerra por el Estado palestino contra Israel. Fue el inicio de pugnas hoy irreconciliables.
En estos días, apenas el 13 de junio, Israel comenzó a bombardear Irán, con el argumento de los avances en el programa nuclear de la república islámica y de que se trata de misiles de guerra. Estados Unidos apareció en el escenario con aviones bombarderos B-2 para accionar el penetrador de municiones masivo (MOP) GBU-57A/B, la mayor bomba no nuclear "rompebúnkeres" del mundo.
En lo que asemejó una presunción, Trump eludió su intromisón en la guerra y aseguró que más bien, ambos países acudieron a él de manera simultánea, para hablar de paz. Es decir, coincidieron con él para hacer realidad este deseo. Dijo con euforia: ’¡El mundo y Medio Oriente son los verdaderos ganadores! Ambas naciones verán un gran amor, paz y prosperidad en sus futuros’.
Añadió: ’Tienen mucho que ganar y, sin embargo, mucho que perder si se desvían del camino de la rectitud y la verdad. El futuro de Israel e Irán es ilimitado y está lleno de grandes promesas. ¡Que Dios los bendiga a ambos!’, escribió. Dijo También que gracias a su paz, China y países de Oriente Medio pueden volver a comprar petróleo iraní. Esto, escasamente a un mes de amenazar con sanciones a quienes comerciaran con el crudo de Teherán.
Al respecto, la vocera del gobierno iraní, Fatemeh Mohajerani, notificó que Irán supero ’estos días difíciles’, sin recordar para nada el alto al fuego anunciado por Trump. Y por su parte, el vicepresidente primero de Irán, Mohamad Reza Aref, subrayó que el anuncio de un alto el fuego supone la admisión de su derrota por parte de EE.UU. e Israel, pues se produjo menos de 24 horas después del ataque con misiles que Irán efectuó contra una base militar estadounidense en Catar.
Las cosas quedaron muy calientes. Por eso China anunció que apoya a Irán para establecer la paz genuina, al considerar que la que se consiguió es demasiado frágil. El Ministro de Relaciones exteriores, Wang Yi, dijo: ’China apoya a Irán para salvaguardar su soberanía y seguridad nacional y, sobre esa base, lograr un Alto al fuego genuino para que la gente pueda volver a la vida normal"
Pero la oficina del Primer Ministro de Israel, benjamín Netanyahu, aceptó que ’su país se abstuvo de realizar más ataques contra Irán el martes, tras una llamada con el presidente estadounidense, Ronald Trump’.
México también tomó parte, pero por desgracia, sólo para hacer el ridículo. Nuestra Presidente opinó que la ONU, organización que padece sus denuestos, debe llamar a la construcción de la paz, Citó al papa Francisco para decir que no hay futuro en la destrucción. Pero en Medio Oriente. No aquí, en el país que gobierna y que cuenta con más muertos que cualquier país en Guerra.
México siempre será factor de paz’, dijo con orgullo, como cuando habla de nuestra soberanía para sus seguidores y concede cuanto le pide Estados Unidos, en negociaciones cuyo contenido nadie conoce. Pretende ser factor de paz en otros lugares, mientras aquí, el miedo consume a una parte muy importante del territorio nacional, con matanzas hasta de inocentes a diestro y siniestro.
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