Micrófono Abierto
Ana Celia Montes Vázquez
"Descansando haciendo adobes", dice el refrán y aplica para este 1 de Mayo, Día Internacional del Trabajo, fecha conmemorativa y día de descanso obligatorio que, en teoría, sirve para reflexionar sobre los logros y condiciones laborales de las trabajadoras y los trabajadores a lo largo y ancho del planeta Tierra, pero que en nuestro país pareciera la extensión del Día del Niño (30 de abril) para que los peques sigan disfrutando de sus juguetes, de salidas, entretenimientos y comida no muy nutritiva que digamos... Sin embargo, la realidad se impone y en México, como seguramente sucede en muchas partes del extranjero, la situación laboral se precariza sea porque no hay suficientes empleos o sea porque están mal pagados los que hay, lo cual también ha sido motivo para que el presidente Andrés Manuel López Obrador haya institucionalizado uno de sus programas sociales asistencialistas estrella: Jóvenes Construyendo el Futuro, el cual pretende otorgar el apoyo monetario a jóvenes para que estudien o aprendan algún oficio con miras a insertarlos en la actividad productiva, todo lo cual suena muy esperanzador. De nuevo la realidad se impone, porque ni se capacitan o estudian los susodichos y sólo se les prepara para seguri recibiendo apoyos.