Con una amplia gama de actividades que fusionan aventura, ecoturismo, cultura y tradiciones religiosas, este destino emblemático ofrece algo para cada tipo de viajero. Acapulco es un verdadero paraíso para explorar y disfrutar.
Desde los espectaculares atardeceres en Pie de la Cuesta hasta los emocionantes deportes acuáticos en la Bahía de Acapulco, hay algo para todos en este destino emblemático.
Los amantes de la naturaleza pueden disfrutar de paseos ecoturísticos en la Laguna de Tres Palos, mientras que los aficionados a la cultura pueden explorar los museos y descubrir su historia.
Durante la Semana Santa, Acapulco se llena de espectáculos artísticos, conciertos en la playa y ferias gastronómicas que ofrecen entretenimiento para toda la familia.
Ven a disfrutar de la Cumbre del Mariachi en la Arena GNP Seguros (17 de abril), el Desfile de Globos Gigantes en la Costera Miguel Alemán (26 de abril) y la presentación especial del personaje Bluey en el Fórum Imperial (20 de abril).
Durante la Semana Santa, los restaurantes de Acapulco ofrecen platillos tradicionales de cuaresma como el Pescado a la Talla, Ceviche y Pulpo enamorado.
Además, las procesiones en la Catedral de Nuestra Señora de la Soledad en el Zócalo de Acapulco son un punto de encuentro para la reflexión y la espiritualidad.
Con su inigualable clima, playas espectaculares y una gran oferta turística que combina diversión, cultura y tradición, Acapulco es la opción ideal para disfrutar las próximas vacaciones de Semana Santa.
Algunas de las actividades que puedes realizar en Acapulco durante la Semana Santa:
– Show de Clavados en La Quebrada.
– Deportes acuáticos en la Bahía de Acapulco y Puerto Marqués (este último con su recorrido especial en lancha a los petrograbados de Playa Majahua)
– Paseos ecoturísticos en la Laguna de Tres Palos y Senderismo en las montañas.
– Clases de surf y visitar al Mariposario ’Itzpapálotl’ en el Barrio Mágico de Playa Bonfil.
– Espectaculares atardeceres en el Barrio Mágico de Pie de la Cuesta.
– Recorrido por el Museo Fuerte de San Diego y Museo de la Máscara.
– Vibrante ambiente en clubes nocturnos.
– Gastronomía tradicional en restaurantes populares.
